miércoles, 19 de mayo de 2010

CÍCLICAMENTE INMUNE

Un septeto en el aire, en ese estado que se ubica entre el miedo a saltar y la seguridad de aterrizar del otro lado del abismo. Esa sensación volátil, mezcla de miedo y expectativa. Sensual, depuradora y con un dejo de malsanidad.

Ahora terminó.

Pasa recurrente, deambula semioculta y experimento en esos momentos un morboso disfrute. Ya son parte de una dinámica a la que llamo "Conservación de las raíces".


A veces la veo llegar y no quiero evitarla. Es un mazoquismo iracundo que busca la superación enfrentándose cara a cara con sus eternos pavores.

Otras veces lo busco, echo sal en mi herida y la observo hasta que se reconstituye. Es un mazoquismo sanador y libertario que destituye el mandato de los deterioros ajenos.

Pienso en la solidez de mis orígenes como un contraveneno para los males del camino a la culminación; y así no permito que lo impuesto y no elegido atraviese las fronteras de mi pacífica comarca.

2 comentarios:

NaveL. dijo...

ja... ahora si nos parecemos un poquito.
Inauguracion el sabado este que viene! Roosevelt y Cabildo (Avant Bar) a tus ordenes gorda!

Anónimo dijo...

Está bueno "conservación de raices" porque te permiten "desarrollar alas"... y volar pero anclada en lo valedero,no? La Negra